La increíblemente hermosa Kitty Jane seduce a un grupo de perrito y consigue un espacio público. Pronto está rodeada de hombres cachondos que la complacen de todas las maneras, con sus pollas moviéndose en su caliente y mojada concha, sus testículos golpeando sus culos mientras la follan vigorosamente, haciéndola gemir por más y más. Las últimas cuatro noches fueron una orgía salvaje e inolvidable.