El hospital está poniendo a la enfermera ninfómana Angel Rivas lejos para una follada anal y de garganta. El paciente recibe lamidas en el coño y el pelo de un conjunto de lencería ajustada con el que está vestida que deja muy poco a la imaginación. La escena perfecta comienza con Angel dándole una mamada sensual y rápidamente se convierte en una sesión de doble penetración muy sucia. El calor empieza a hacer que Angel gima fuerte mientras la gran y gruesa polla llena.