Algunos de los actores del video son pervertidos y sumisos que presentan escenas hardcore de BDSM. Están atados con cuerdas y su boca es amordazada por sus amos que se divierten penetrándolos sexualmente en todos los orificios. Sucede en el segundo nivel, los cajones están apuestos a los participantes y todos son fisteados y azotados sin piedad.